Roma para mi es
la ciudad por excelencia, una ciudad que con cada rincón y cada esquina tiene
una obra de arte o una gran catedral. Imposible de ver todo en un viaje.
Hicimos una
"escapada" de 5 días en Semana Santa a la capital italiana, y aunque vimos todo lo
más conocido me quede con ganas de más. Es de las pocas veces que voy paseando
por una ciudad y en cada rincón tengo algo nuevo para ver y sin repetir nada.
Me quedé con ganas de estar más días, en su defecto, volveré más adelante a una
ciudad que me dejó enamorado.
Una cosa que me
sorprendió, es que el centro de Roma se puede hacer tranquilamente a pié, cosa
que no se puede hacer en ciudades como París por ejemplo. Roma te permite ver
toda su parte turística a pié sin ningún problema, eso sí, las piedras de las
calles y aceras de Roma son un reto para tobillos delicados o zapatos con
tacón.
Otra de las cosas
que me encantó fue su gastronomía, soy un enamorado de la comida italiana y me
sorprendió que al ser una ciudad tan turística pudieras encontrar restaurantes
para comer por un precio aceptable y con una calidad también muy buena. Incluso
en los restaurantes donde ya te veías que daban un menú para turistas estaba
bueno, no como pasa en otras ciudades europeas y incluso en España. Puede que tuviera
suerte, pero realmente si nos encontramos con algún problema no fue por culpa
de la comida, sino por el servicio (con una solución aceptable como ya contaré
en mi próxima entrada de comer en Roma).
Esta entrada solo
es de presentación de la ciudad, y en las próximas ya me dedicaré más
específicamente en cosas más concretas, las próximas entradas van a ser:
- 10 imprescindibles Roma (parte 1)
- 10 imprescindibles Roma (parte 2)
- Comer en Roma
- Lo que me quedó por ver en Roma
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